jueves, 12 de marzo de 2009

Hipólito Mejía

Hipólito Mejía
Julio Mariñez Rosario

El tiempo es un catalizador eficaz. Hoy vemos los gobiernos dominicanos del siglo XIX desde otras perspectivas. No estamos inmersos en el fragor del combate político de ese momento. El manejo de una mayor cantidad de data nos permite una cosmovisión que nos ayuda a considerar elementos que en el instante, o no se conocían, o se ponderaban de manera diferente.
La vida política de Hipólito Mejía será estudiada por los historiadores del futuro con un lente distinto al de los analistas actuales. Al llegar a la Presidencia, el PRD tenía doce años fuera del poder y no hacia mucho tiempo la muerte nos había arrebatado a nuestro más grande líder, el compañero José Francisco Peña Gómez. El partido en ese momento era una especie de confederación de tendencias y existió una decisión de integración que dio como resultado un indiscutible triunfo electoral y luego, ya con el presidente Hipólito Mejía, la mayoría de las individualidades pasó a formar parte del gobierno, dándole oportunidad al amplio espectro en que se había transformado el PRD.
Hipólito comenzó obras importantes, en cada provincia, en la mayoría de las comunidades de la República Dominicana. Fue su visión desde el poder, de cómo llevar la mano amiga del presupuesto público a cada rincón de la patria. Enfrentó la más terrible crisis financiera que haya vivido la república, con la quiebra de bancos y una devaluación de la prima del dólar, bestial. Se arriesgó a seguir adelante con los Juegos Panamericanos, lo que suponía una inversión descomunal para un país como el nuestro. Reto del que salimos airoso gracias a la tenacidad del Presidente del Comité Olímpico Dominicano; Dr. José Joaquín Puello y su equipo, ofertándole al continente y al mundo unos juegos signados por excelencia.
Entre tantos valiosos compañeros y amigos que rodearon al presidente Mejía, una minoría le inculcó el fantasma de la reelección que mucho daño nos hizo. El presidente Mejía se mantuvo, como consecuencia de esto, prácticamente con el mismo gabinete, durante sus cuatro años de mandato. Pocos cambios y donde había que colocar sangre nueva, se dejaba al titular aunque fuese público y notorio que perjudicaba la gestión. Un concepto avieso de la amistad que tanto menoscabo le hizo al país y al PRD. Finalmente, su empeño en repostularse, contraviniendo el compromiso histórico antirreleccionista del PRD y el legado de Peña Gómez, compartido por la mayoría del partido, marcó su huella. Con mayoría en los poderes del estado y visualizando su interés, el presidente Hipólito Mejía, pactó con el partido reformistas y les entregó una desproporcionada parte del poder, que los perredeístas habíamos ganado con el voto popular, como fueron; la Cámara de Diputados, la Liga Municipal Dominicana, el Ministerio de Industria y Comercio, Embajadas, Consulados, entre otros favores políticos. El 16/05/04, los votos reformistas no aparecieron, la estrategia colapsó, sin embargo de nuevo se monto el acuerdo PRD-PRSC, para el 2006, los peledeístas lo peyorizaron como la “Alianza Rosada”. Aquel ingenio disminuyó nuestras fuerzas y fracturó sensiblemente la unidad interna del partido. Así transitamos hacia las elecciones generales del 16/05/08. Al aproximarse las elecciones presidenciales a principio del mes de marzo, se motorizó un encuentro-almuerzo en la ciudad de Santiago de los Caballeros, en casa de un amigo común, de Hipólito Mejía y el entonces candidato presidencial del PRSC, se trataba de que Hipólito recabara el preacuerdo de apoyo a la candidatura presidencial del PRD, representada en Miguel Vargas Maldonado, pero Amable Arísty se negó rotundamente. Hipólito hizo su acto de contrición.
En un encuentro de días anteriores a este acontecimiento, una versión de “garganta profunda” informó, que el candidato reformista había pactado con el Presidente Fernández en el Palacio Nacional, un acuerdo, de no llegar a acuerdo, con Hipólito Mejia y el candidato del PRD, sin embargo la candidatura de Miguel Vargas Maldonado, obtuvo un importante 40.48%. El partido sin embargo, aun no desarrolla una oposición firme, con planteamientos sólidos, irrefutables, buscando avanzar en el camino de fortalecer la unidad, en la diversidad de las corrientes internas, como única vía, que garantiza la participación de todos sus componentes, para ganar las elecciones.
Es fundamental el trabajo de orfebrería política, que deben seguir desarrollando los y las perredeístas, para recuperar el poder en los años 2010 y 2012. La buena voluntad de los lideres emergentes como: Miguel Vargas y Luís Abinader entre otros, y la experiencia, carisma y derechos adquiridos, que es dueño el ex presidente Mejía, proyectan la operación que necesita el PRD, para triunfar. Honremos la mayoría en democrática, porque ¡conciliar es ganar e Hipólito como nadie, lo sabe!
Publicado en el Listín Diario, 11/03/2009

lunes, 2 de marzo de 2009

Los 27 años de Juan Vicente Gómez

Los 27 años de Juan Vicente Gómez
Julio Mariñez Rosario

Juan Vicente Gómez ha sido el dictador quien gobernó más tiempo a Venezuela y dejó una marca que trascendió a toda la América Latina y el Caribe. Pero conversando con amigos venezolanos, uno se da cuenta que tras el fin de la dictadura, en menos de una generación, muy poco quedó de lo instaurado por el régimen gomecista.A los pocos días de haber fallecido, el pueblo de Caracas y Maracay asaltó las propiedades de la familia y de los dirigentes más reconocidos del gobierno del difunto. Todo a pesar de que el sucesor era el Gral. Eleazar López Contreras su Ministro de Guerra y Marina (1936-41). Pero el peso de la exigencia de cambios y reivindicaciones, no lo podía torpedear el nuevo mandatario, quien era miembro, siendo muy joven, del grupo original que conquistó el poder a finales del siglo XIX, con Cipriano Castro a la cabeza.
Al poco tiempo se conquistó la libertad de prensa, se permitían manifestaciones y selegalizaron partidos políticos. Solamente se prohibían las organizaciones comunistas y por ello fueron expulsados del país connotados líderes políticos.Todo el andamiaje de persecución, cárcel y asesinatos fue útil para mantener al déspota en el poder en un país caribeño que era parte del juego geopolítico de una época en que el petróleo y el Canal de Panamá eran piezas de importancia. De eso sabemos los dominicanos, quienes sufrimos en carne propia la suerte de nuestra ubicación geográfica.
Hoy Venezuela transita por un nuevo régimen signado por el autoritarismo. Con unpopulismo de izquierda que le han llamado “Socialismo del siglo XXI”. Claro está,moderno, que utiliza los recursos del poder no de la manera primitiva y bestial como lo hacía su antepasado Juan Vicente Gómez, sino aplicando nuevas técnicas de control político y social. Se criminaliza la disidencia, argumentando que los presos no son políticos, sino políticos presos. El famoso caso del maletín contentivo de 800,000 dólares que salpican al Gobierno argentino, no se ventila en Venezuela, pero se le apertura un juicio al candidato presidencial opositor, Manuel Rosales, porque en su administración como gobernador del estado Zulia le donó a los policías vehículos retirado y sin valor, o sea chatarra, de la policía. Mientras el presidente Chávez regala cien tractores a Honduras, camionetas blindadas a Evo Morales y plantas eléctricas a Nicaragua, entre otros donativos.
Las denuncias de abuso de poder son tema cotidiano en Venezuela. Al eurodiputadoespañol Luis Herrero lo expulsaron del país de manera tan abrupta que al llegar alaeropuerto no tenía el pasaporte y fue necesario que una comisión policial fuera al hotel donde estaba hospedado a fin de buscar los documentos y su equipaje. El uso de los recursos del Estado en las últimas elecciones fue grotesco y se llegó al colmo que la prensa entrevistó a un grupo de observadores internacionales, representantes de países Centroamericanos y del Caribe, teniendo uno de ellos una gorra con propaganda chavista.
Le preguntaron al representante de la República Dominicana, que opinaba del delegado internacional, quien estaba físicamente a su lado, sobre el uso de la propaganda y el señor representante del gobierno peledeista dijo que él no veía nada. Eso se pudo ver en la televisión internacional y dejó muy mal representado a nuestro país.Pero tal como ocurrió con el régimen de Juan Vicente Gómez, en el hermano puebloVenezolano la democracia no perecerá, saldrá de esta pesadilla y en poco tiempo sedisolverá todo ese sistema de alienación y fuerza, sostenido por una cuenta alimentada por los aún altos precios del petróleo. Más temprano que tarde ese país regresará al concierto de las naciones democráticas y seguirá su camino en la construcción de su realidad. Para nosotros, lo importante, es que la experiencia obtenida por el observador dominicano no siga el camino errático del gobierno del del PLD, que ya tiene en su haber bastantes registros de abusos en función de mantenerse en el poder, solo por el poder.
Reflexionemos en las orientaciones del ex primer ministro ingles Benjamín Disraelí que dijo; “Dos errores no dan una razón”. No necesitamos remontarnos al ejemplo democrático que nos legaron los patricios y pensadores; Víctor Raúl Haya de la Torre, Rómulo Betancourt, José Figueres y Luís Muñoz Marín, entre otros. Aquí tuvimos el buen ejemplo de Juan Bosch y de José Fco. Peña Gómez, de lo que debe ser democracia en libertad.
El socialismo democrático se está imponiendo en la región de Latinoamérica y el Caribe, y los ejercicios de gobiernos de izquierda como el de Brasil y Chile, son el paradigma a seguir!
Publicado en el Listín Diario, 27/02/2009